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 Aprovechamiento de las plantas Silvestres en el Río Martín                                                        Fernando Gabarrús

3.-APROVECHAMIENTO POPULAR DE PLANTAS SILVESTRES.

 

Los habitantes del Río Martín a lo  largo de los tiempos han perfeccionado la larga serie de conocimientos, técnicas y herramientas necesarios para lograr el pleno aprovechamiento de la Naturaleza. Esa sabiduría colectiva, enriquecida y transmitida de generación en generación se manifiesta de forma significativa en el conocimiento y uso de las plantas silvestres que crecen en campos montes y ríos.

La gran variedad de plantas es aprovechada para muy diversos usos: medicinales, aromáticos, cosméticos, ornamentales, comestibles, artesanales, mágicos…

 

Muchas plantas medicinales han sido usadas en la comarca como remedios caseros. En casi todas las poblaciones existen vecinos (curanderos, yerberos) a los que se les reconoce un mayor conocimiento al respecto. Estos han recogido tradicionalmente plantas como tremoncillo, manzanilla, romero, ababol, selvia, finollo…; se hacen ungüentos de matacangrena  colirrata, saca y mete, jarabes para la tos, pomadas cicatrizantes. También ha sido muy importante la recolección de plantas aromáticas. El espligo se arrancaba en septiembre una vez acabadas las faenas del cereal. Casi todos los vecinos se dedicaban a segarlo y transportarlo en caballerías hasta las calderas, donde los espligueros, que provenían de fuera de la comarca, lo cocían para destilar su esencia, un aceite muy usado en perfumería. Les pagaban por fajos y conseguían así un dinero en efectivo con el que podían pagar la contribución, comprar algunas alpargatas, algún regalo…No sólo podemos hablar de la importancia de los usos medicinales y aromáticos, las plantas jugaban un papel fundamental en el complemento de la dieta y encontramos multitud de plantas comestibles. Se aprovechaban raíces, tallos, frutos, y hojas de varias plantas para elaborar tortillas (tuca), cocidos (finollo, cardos de monte), ensaladas de fusiellos, Se recolectan turmas y colejas. Se hacen infusiones de cabezuela, te de roca, poleo. Son muchos los hongos y setas que se recogen en las comarcas, desde los conocidos rebollones, hasta las setas de cardo, las carretillas, los eslizadores, los boletos, los hongos de tierra, las setas de chopo, las de impelte. Para finalizar no podemos olvidar los usos textiles de plantas. La fuerte fibra de esparto era utilizada por los esparteros, seroneros y en alguna ocasión cesteros y alpargateros... Esta cultura transmitida oralmente hasta nuestros días corre el peligro de ser olvidada y desaprovechada, cuando desde nuestro punto de vista puede ser, en muchas ocasiones, el punto de partida para el desarrollo económico. La economía actual pretende convertir a todos los componentes de la cadena productiva en meras variables para conseguir un mayor beneficio por ello combina mano de obra, materias primas, medios de transformación, infraestructuras haciéndolos coincidir aunque se encuentren a miles de kilómetros. El planteamiento de nuestro trabajo propone el cambio de esta mentalidad, no en la obtención del justo beneficio pero sí en el cambio y transformación de las formas deshumanizadas y extremas que ha demostrado el modelo económico actual. No nos cabe ninguna duda de que la producción  debe basarse en la consecución de unas buenas materias primas pero   directamente complementada por  la transformación de las mismas en el lugar de origen. Como ejemplo ilustrador expondremos la situación en la que se encuentra el sector de la caña en Aragón. Que poseyendo el tipo de caña de mejor calidad para la elaboración de lengüetas para instrumentos musicales, sólo realiza la selección, el corte, el secado y la división estandarizada de la misma para después enviarla a Inglaterra, Francia, Estados Unidos y Alemania donde las grandes multinacionales generan las plusvalías de su transformación multiplicando el beneficio industrial  y demográfico en comparación con el área de producción de la materia prima. No podemos olvidar que en el río Martín, concretamente en Híjar está uno de estos centros de producción de caña  que junto al de Quinto de Ebro proporcionan la mayor parte de la materia prima para uso musical. Desde este punto de vista es desde el que debe leerse el trabajo. La curiosidad y el conocimiento si no tienen una aplicación práctica, si no nos sirven para mejorar, para progresar se convierten en  cualidades vacías, formales y sin contenido.

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