Una de las personas de más relevancia en el pueblo de Valtorres fue fray Antonio García (1526-1590), el último obispo auxiliar de los arzobispos de la Casa Real de Aragón. Maestro en Sagrada Teología y monje profeso en el monasterio cisterciense  (Francisco Fernández Serrano señala en "Obispos Auxiliares de Zaragoza en tiempos de los arzobispos de la Casa Real de Aragón" de 1969 la pertenencia de Antonio García a esta orden y no a la benedictina como indica Francisco de P. Moreno Sánchez en "Juegos florales de Zaragoza" de 1894.) de Santa María de Piedra, más conocido como Monasterio de Piedra (a unos 18 kilómetros de Valtorres) fue abad desde 1550 hasta 1554. Posteriormente, ocupó el puesto de vicario y visitador general del arzobispo de Zaragoza, Hernando de Aragón (1539-1575), de la misma orden religiosa y que también había sido monje en el citado monasterio y quien en diciembre de 1564, le había nombrado su auxiliar con el título de obispo de Utica en Albalate del Arzobispo. Al no poder residir fray Antonio en su sede titular por hallarse en tierras de infieles, practicó su ministerio pastoral en la vasta diócesis de Zaragoza y fueron frecuentes sus intervenciones pontificales, por delegación del arzobispo, a quien desde 1573 suplió casi en todo. En 1566 ofició en los solemnes actos funerales dedicados a la memoria del Papa Pío IV en la Seo de Zaragoza. En 1575 asistía espiritualmente a don Hernando moribundo y quedaba como su albacea testamentario. La estrecha colaboración de fray Antonio con su arzobispo, Hernando de Aragón, facilitaría la relación del pintor Jerónimo Cosida con el prelado de Valtorres. La relación de Cosida y fray Antonio ya había tenido efecto en 1566 (Jesús Criado Mainar: El círculo artístico del pintor Jerónimo Cosida. Centro de Estudios Turiasonenses-Institución "Fernando El Católico", CSIC. Servicio de publicaciones del Excmo. Ayuntamiento de Tarazona. Tarazona, 1987. pp. 84-86. Lámina 19, p. 119.) , cuando el Obispo de Utica capitula con Jerónimo Cosida y Vallejo la realización de un retablo para la iglesia del monasterio de Trasobares por precio de 6.000 sueldos: El Retablo Mayor de Nuestra Señora de la Asunción. Fray Antonio García, para sufragar los gastos de construcción de una capilla funeraria y la fundación de una capellanía en la iglesia de Valtorres, contó con mil libras legadas por su arzobispo y con la dotación de veinte mil sueldos que recibía anualmente como heredero de los bienes del reverendo Antonio Ayerbe (Podemos encontrar la donación en el Archivo Histórico de Protocolos. Notario: Lucas de Bierge, folios 41-61. En este documento podemos encontrar a dos hermanos naturales de Valtorres del mismo apellido, Juan García y Martín García, como otros beneficiarios de la donación dre Ayerbe.) , que así lo había dispuesto. Con estos recursos económicos encargaría el importante retablo para la iglesia del pueblo de Valtorres con un precio de 2.400 sueldos jaqueses. (Aparece la interesante reproducción del contrato entre el Obispo de Utica Antonio García y Jerónimo Cosida en Documentos para la historia artística y literaria de Aragón procedentes del archivo de protocolos de Zaragoza, siglo XVI. Tomo I. Zaragoza, 1915. Pp. 60-61. (Proviene de: Jerónimo Andrés, Lig. 20.E.7.-Fol. 428)) Siendo Obispo, Antonio García visitaría Valtorres entre otros pueblos al recibir del obispo de Tarazona, D. Juan Redín Cruzal, el cargo de visitador diocesiano. Según aparece en el documento de Francisco Fernández Serrano y así lo recuerdan los vecinos del pueblo, en el arco de entrada a la capilla del obispo (donde se encontraba el retablo) en la Iglesia de la Anunciación en Valtorres, permanecía colgado el sombrero episcopal del obispo.

Aunque no se sabe con seguridad que el cuerpo del obispo fuera enterrado en esta iglesia (según menciona C. Morte (Carmen Morte García: A propósito del retablo de Valtorres (Zaragoza), obra del pintor renacentista Jerónimo Cosida. Miscelánea Homenaje a mossèn Jesús Tarragona. Ayuntamiento de Lérida, 1996. p. 342.), J. Finestres. (J. Finestres: Historia del Real Monasterio del Poblet. Cervera, 1753, t. II, p. 168) asegura que fue inhumado en el monasterio cisterciense de Santa Fe, en la provincia de Zaragoza) según testigos presenciales, hace unos doce años, cuando ésta fue derruida, apareció una tumba y restos funerarios debajo de donde se encontraba el Retablo de la Pasión de Cosida que pudieran ser pertenecientes a fray Antonio García, Obispo de Utica. Una de sus últimas actuaciones fue la bendición de la primera piedra para la construcción de la Universidad de Zaragoza.