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La música populart en el río Martín Fernando Gabarrús |
Las nuevas costumbres socioeconómicas, el dominio de la información visual, el abandono de los pueblos para vivir en la ciudad, la homogeneización cultural que provocan los medios de comunicación de carácter masivo,...son hechos que han llevado a la desaparición y desprecio de la música popular, que constituye muchas veces la única herencia de siglos anteriores al nuestro. Hecho especialmente agravado por ser su único medio de conservación la tradición oral, que obviamente, carece de un soporte físico que asegure su perduración. No podemos olvidar que las manifestaciones culturales transmitidas por vía oral, además de ser las depositarias naturales de conocimientos de siglos, han sido las que representaban y utilizaban la población iletrada, que recordemos era mayoritaria hasta hace pocos años. Quizás esa ligazón con el sonrojante analfabetismo, ha sido, consciente o inconscientemente un factor fundamental en el olvido e infravaloración de este patrimonio. La voluntaria y acelerada huida hacia la modernidad requiere previamente la sustitución de valores, costumbres y manifestaciones tradicionales por otras más de acuerdo con lo que dictan los nuevos tiempos, renegando por atrasadas y carentes de valor de lo que hasta hace unos años era la esencia cultural de nuestros antepasados. Mal
acostumbrados a dejar la recuperación de nuestro patrimonio en proyectos futuribles, en actuaciones de urgencia
ante desastres inminentes o ya producidos, en esperas fundamentadas en frases como
“lo que ha aguantado 300 años puede aguantar 5 más ..” se nos olvida que la
cultura oral es etérea por definición. Son
gentes de 60, 70, 80 años los últimos depositarios
de estos conocimientos y tres o cinco años, para
un bien inmueble, puede no ser significativo. Pero sabemos por experiencia que en nuestro
ámbito de actuación significan
irremediablemente la desaparición de una parte de los posibles informantes y con ellos la
segura y total pérdida de un pedazo de nuestra historia. El frágil legado de esta cultura oral ha llegado hasta nosotros en forma melodías, cantos, ritmos y bailes de nuestros mayores que no pueden ni deben esconderse Para recuperar y dar a conocer el universo de la música popular, en el marco de río Martín, es necesario realizar un esfuerzo para acercarnos a nuestros orígenes, ayudando a las generaciones futuras e incluso a la actual , a conocer y valorar la ”Cultura Propia”, no para utilizarla como elemento diferenciador; y discriminador, sino más bien con otra finalidad: convertirse en el catalizador que haga proyectar nuestro pasado en el mundo actual. Haciéndonos más universalistas pero desde el profundo conocimiento y respeto a nuestras raíces, que en definitiva son las que posibilitan esta proyección sin complejos y el reconocimiento de lo que llamamos “ciudadanía del mundo compartida”. Es hora de poner a salvo todos estos conocimientos, al menos dentro del ámbito del río Martín, desarrollando una labor de grabación, archivo, catalogación , estudio y exposición hasta ahora realizada de forma parcial. Y este será nuestro objetivo básico en la campaña de recopilación. Nuestra exposición se basará en la descripción del ciclo festivo desarrollando una introducción contextualizadora y una exposición explicativa de los testimonios recogidos con su trascripción escrita. Esta información se completará con grabaciones en discos compactos. |