El propuesto proyecto de actividad se plantea entorno al bien patrimonial etnológico que conforma la arquitectura hidráulica protoindustrial.

Entendiendo como tal, aquel que se diseña, se construye, teniendo como objetivo y finalidad el aprovechamiento de los recursos hídricos del territorio y caracterizada a su vez, porque comprende soluciones tecnológicas anteriores a los avances de la Revolución Industrial. Según el Diccionario de La Real Academia Española, arte de conducir y aprovechar las aguas, o construir obras debajo de ellas.

 

En torno a los recursos hídricos podemos encontrar tres funciones fundamentales que desarrolla la arquitectura, que nos ayudan a comprender el bien patrimonial del presente proyecto de investigación.

 

1. Las funciones relacionadas con el consumo de este bien de primera necesidad, tanto domésticas como agrícolas, así los pozos, aljibes, cisternas, fuentes, lavaderos o las conducciones de agua para el riego, acequias, albercas, azudes, … a las que se añaden algunos ingenios humanos como las norias, … que forman parte de esta arquitectura al aportar elementos fundamentales y complementarios a la misma.

 

2. En segundo lugar, aquellas que aprovechan la fuerza del agua para diferentes fines productivos como, los molinos que, dependiendo del objeto que expriman, estrujen, o golpeen, se definirán como harineros, almazaras, martinetes, batanes, y un largo etcétera.

 

3. Y en tercer y último lugar, las soluciones que precisan de la arquitectura para enfrentarse a la naturaleza inestable de los cursos fluviales, como puentes, presas, u otros.

El patrimonio hidráulico lo constituyen diferentes artefactos tecnológicos tradicionales del complejo productivo rural, que constituían los medios de producción cruciales para el desarrollo económico, señalando a su vez las disyuntivas sociales de cada territorio, de forma que son patrimonio de gran riqueza cultural y etnológica, aún hoy por estudiar y revalorizar.